Propusimos la dolarización, hace ya casi 15 años, por muchas razones y una de ellas era que nos blindaba de las crisis políticas, inclusive que nos aislaba de las crisis externas. Y no nos equivocamos, no hemos tenido crisis desde entonces. Lastimosamente, los directivos del Banco Central (Diego Martínez Vinueza, Presidente, Patricio Rivera, Richard Espinoza, Fausto Herrera, Pabel Muñoz, Verónica Gallardo) están proponiendo una medida que pone en serio riesgo al sistema financiero, que bien puede llevarnos a una crisis peor que la de 1999.
No quiero dudar del motivo que les lleva a proponer este “dinero electrónico” pero hay que advertir de las consecuencias funestas que entraña. Veamos cómo se generaría la crisis. Primero unas cifras: (1) la reserva de libre disponibilidad son de apenas 1.500 millones de dólares, (2) los depósitos en la banca llegan a 20 mil millones de dólares y (3) la banca dispone de unos 4 mil o 5 mil millones de dólares en reservas.
Cómo funciona el dinero electrónico
En el mundo moderno los pagos a través del teléfono o por internet facilitan las transacciones comerciales. Usted tiene en su cuenta bancaria un balance, solicita que le transfieran de su cuenta a la cuenta del almacén sea por teléfono o utilizando una tarjeta de “débito” y se acabó. Ahora bien, los del Banco Central dicen que crearán un mecanismo similar, pero lo que no explican es de dónde van a salir los dólares para realizar el pago. Si una persona deposita dólares en una cuenta en el BCE (igual a una cuenta en un banco privado) y realiza el pago electrónicamente, no hay problema, porque su pago está respaldado por los dólares que depositó. Pero sí el BCE le da a un empleado público una cuenta para que realice pagos, el BCE debería tener exactamente el balance en dólares; si no los tiene en cantidad suficiente ha creado dinero de la nada. Y como ésto lo podría hacer indefinidamente, sabemos de las consecuencias nocivas de inflación, fuga de divisas, ahorros en “el colchón”, igual como ocurría antes de la dolarización.
Respaldos falsos y monetización de la deuda fiscal. Dicen que los dólares “electrónicos” van a estar “respaldados” con activos del BCE. ¿Cuáles activos? Los dólares en reserva de libre disponibilidad son buenos, pero qué tal los carros de los directivos del BCE ¿serán legítimos? Claro que no. Lo más lógico son los bonos del gobierno central, es decir la deuda fiscal. En otras palabras, la diferencia entre dólares “buenos” y dólares “electrónicos” va a pasar a ser deuda fiscal. ¿Qué liquidez tienen los bonos del gobierno ecuatoriano? Pregunten a los chinos que nos prestan con intereses de más de 7 por ciento con garantías de petróleo.
Las consecuencias nefastas “anticipadas”
Cuando un gobierno realiza políticas sin detenimiento hay consecuencias “inesperadas”, pero en este caso las consecuencias son bien y requete bien conocidas. Hemos mencionado la inflación y sabemos que los más afectados de precios son los empleados a sueldo fijo, los pensionados, los que reciben el bono de desarrollo humano. ¿No son esos a los que supuestamente se quiere beneficiar?
Aumento del precio de los bienes importados. Supongamos que un importador recibe dólares a través de la cuenta electrónica ¿Qué pasa si el BCE no tiene dólares “buenos” para que haga sus pagos en el exterior? Tendrá que suplirlos de alguna otra manera, esto implica que el importador va a tener dólares en “reserva” o tendrá que pedirle prestado a alguien. Esto significa que los bienes importados van a subir de precio para compensar la pérdida de liquidez.
Virtual reducción del salario de los empleados públicos y otros. Como el BCE puede “crear” dinero de la nada, los salarios de la burocracia, los ingresos de los contratistas del gobierno, de los beneficiarios de los bonos de desarrollo humano y cualquiera que reciba plata del gobierno, corren peligro porque cuando quieran hacer sus pagos donde compró su electrodoméstico, por ejemplo, el almacén le va a aceptar pero con “descuento”. ¿Por qué? Porque el almacén sabe que cuando va a retirar dólares “buenos” corre el riesgo que no los haya en suficiente cantidad.
Precariedad de la banca privada. La banca privada está obligada (el dinero electrónico va a ser de curso legal) a aceptar depósitos de dólares “electrónicos” y a la vez tiene la obligación de hacer pagos en dólares “buenos”. Como la cantidad de dólares electrónicos es mayor que la cantidad de dólares buenos, el banco tiene que suplir la diferencia, ¿cómo? Trayendo del exterior las divisas que tiene en reserva y si la diferencia entre los dos dólares es cercana a los 3 mil millones de que dispone, la banca corre un serio peligro de falta de liquidez. ¿Habrá entonces otro “feriado bancario” y congelamiento de depósitos?
Reducción de la liquidez monetaria ( fuga de divisas) y recesión. Ante la posibilidad de que la banca no tenga dólares “buenos”, la gente más o menos consciente comenzará a sacar dólares y “guardarlos en el colchón”, los almacénes, los importadores, las empresas también tendrán liquidez pero en bancos extranjeros. Ante la falta de liquidez, los exportadores tendrán temor de que les incauten sus divisas y tendrán los “buenos dólares” en el exterior. La reducción de la liquidez no es más que un término económico para decir: no hay plata. Y si no hay plata para comprar, no hay plata para producir (para pagar a empleados y suministradores), entonces fácilmente podremos caer en una seria recesión.
Conclusiones
Debemos entonces tener muy claro que el mayor peligro para la economía del Ecuador no es el precio del petróleo ¡son las políticas de los directivos del Banco Central! Por eso es importante conocer sus nombres. Ellos serán los responsables de la inflación, de la fuga de divisas, de la recesión y lo que es peor del empobrecimiento de la población..
por el alza continua de