Saturday, January 3, 2009

LOS AMIGOS DEL PRESIDENTE CORREA

El presidente de los Estados Unidos, Dwight Eisenhower, hizo célebre el adagio que dicen es de origen árabe, cuando justificó el apoyo a ciertos dictadores de América Latina afirmando que "los enemigos de mi enemigo son mis amigos".
Estos dictadores, como Somoza de la República Dominicana, eran abiertamente anti comunistas y el peor enemigo de los Estados Unidos en esa época era la Unión Soviética, que quería propagar por el mundo el comunismo, sistema de concentración fascista del poder que implicaba la desaparición de la democracia occidental.
Debido al evidente rechazo a los movimientos comunistas y pro comunistas de tales dictaduras latinoamericanas, Washington veía con indiferencia esa otra forma de represión de la democracia y ofrecía apoyo económico, militar y táctico a los tiranos y tiranuelos a condición de que frenaran la propagación comunista.
Ahora se advierte que tal política era equivocada y se la ha rectificado, como es el caso del actual presidente George W Bush. El objetivo ahora de la "doctrina Bush" es propiciar la construcción de las democracias por todo el orbe y aunque la amenaza del comunismo casi ha desaparecido tras la caída y disolución de la URSS, el nuevo enemigo de la democracia es ahora el fundamentalismo musulmán.
El presidente ecuatoriano Rafael Correa es un economista que estudió 4 años de Economía en los Estados Unidos. No obstante, el lapso vivido en este país no le sirvió para entender mejor su cultura e historia. Al contrario, tan pronto asió el poder político en el Ecuador como Presidente (y antes como ministro de Finanzas del régimen previo) enfiló todas sus acciones a acomodar al país y sus instituciones a su ambición de gobernar como un fascista.
(La definición moderna del fascismo es, según el website YourDictionary: "...a system of government characterized by rigid one-party dictatorship, forcible suppression of opposition, private economic enterprise under centralized governmental control, belligerent nationalism, racism, and militarism, etc." lo que en español significa: "...sistema de gobierno caracterizado por una dictadura de rígido unipartidismo, supresión por la fuerza de la oposición, la empresa privada bajo control centralizado del gobierno, nacionalismo beligerante, racismo, militarismo, etc.")
Este estilo Correa está logrando de manera acelerada. La oposición ha desaparecido y no hay sino un solo partido político, el de Correa. Las funciones tradicionales de la democracia para frenar los excesos del ejecutivo han sido vandalizadas y las que han surgido de los escombros son sumisas por completo a la voluntad del dictador constitucional, como en la Venezuela de Hugo Chávez. Muchos medios de comunicación escritos y audiovisuales son ahora de propiedad del Estado y los privados que sobreviven son constantemente asediados y vejados por Correa, cuya incontinencia verbal no se diferencia en nada de la de los tiranuelos tradicionales.
En esa campaña permanente por destruir a sus opositores y absorber poderes, Correa ha hecho de los Estados Unidos y su forma de gobierno un anatema casi diario. La explicación es clara: los Estados Unidos y los países que comparten parecidos sistemas de gobierno son antípoda del fascismo y hay que combatirlos. No importa si la política ha variado y que el mundo ya no se divide tajantemente entre comunismo y pro comunismo frente al anticomunismo.
 Correa insulta a los Estados Unidos porque es antípoda de su concepción de gobernar. Él va en pos del fascismo concentrador de poder como ocurrió con la Alemania nazi y la URSS. Estas formas arcaicas han fracasado, fueron derrrotadas por las fuerzas militares de las democracias de Occidente, pero aún subsisten en Cuba, Corea del Norte y en las áreas árabes del Medio Oriente, Asia y África.
El contraste entre democracia/libertad y fascismo es obvio para cualquiera con sentido común y conocimiento de la historia. El absolutismo en todas sus formas humilla al ser humano y lo empobrece material y espiritualmente. Cuba, hasta 1959, era la nación con el más alto nivel de vida en América Latina. Con la dictadura de medio siglo de Fidel Castro, es ahora una de las más oprimidas y miserables. Corea del Norte tiene que recurrir al chantaje nuclear para proveerse de petróleo y alimentos para aliviar la hambruna de su pueblo.
Ciertamente que en Cuba pre Castro, como en el Ecuador y en todas las democracias del mundo, el sistema no era ni es perfecto,porque nada de lo humano es perfecto. Pero el fascismo, en sus variantes comunista, socialista o falangista, se auto califica de utopía perfecta y es todo lo contrario. Correa y sus coidearios Correa, Chávez, Evo Morales y el mentor Fidel Castro lo saben pero sostienen que el socialismo del siglo XXI es la respuesta a las imperfecciones de la democracia. La mentira la han disfazado con dádivas populistas financiadas por los excedentes en los precios petroleros, pero ya esa farsa comienza a evaporarse y el colapso económico está ad-portas.
Arrecian en consecuencias las diatribas contra los Estados Unidos y sus aliados y amigos. Esa tendencia se refleja en el giro que Correa ha dado a la política internacional que parece guiarse con una paráfrasis del adagio de Eisenhower: "todos los enemigos de mi enemigo son mis amigos". A lo que habría que añadir: "todos los amigos de mi enemigo son mis enemigos", como en el caso del presidente colombiano Álvaro Uribe. De ahí que en la lista de "fraternos" de Correa figuren Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua y últimamente Irán y otros extremistas musulmanes. (Quiere incluir a Rusia y China, pero ese es otro error de visión de Correa)
El nuevo canciller ecuatoriano acaba de divulgar un comunicado mentiroso de respaldo al movimiento terrorista Hamas. Acusa a Israel, no a Hamas, de actos brutales y asesinos y se solidariza tácitamente con sus acciones de terror contra Israel. Y tácitamente también da su respaldo a Irán y Siria, que fomentan con armas y dinero dichas acciones terroristas en Israel, Irak, Líbano, Afganistán y, por extensión, en otras zonas distantes como Mumbai, Indonesia, Túnez, Madrid y, si pudieren, los Estados Unidos y otras áreas de Europa.
En su charla radial de los sábados, Correa ha dicho hoy que irá feliz de visita a Cuba esta próxima semana. "Es una gran deferencia que nos han hecho" al invitarnos a la celebración del 50 aniversario de la dictadura castrista, afirma. Se supone que utiliza el "nos" no como el Papa, sino en referencia a los ecuatorianos. ¿Los ecuatorianos se sienten realmente honrados de rendir pleitesía a una dictadura interminable, que se delega sin pudor de un hermano a otro y que mantiene subyugada a una mayoría que acaso da su apoyo en las encuestas porque no tiene otra opción?
A propósito de encuestas, sería interesante averiguar si la mayoría ecuatoriana está consciente y de acuerdo con la destrucción del sistema de empresa privada libre en el Ecuador, con la carga de insultos con los cuales pretende doblegar a banqueros y periodistas cada vez que alguno de ellos osa criticar sus medidas y sus acciones,  si concuerda con la alianza del Ecuador con las naciones terroristas. Y si les parece aceptable su inconsistencia en el manejo de la deuda externa, el asalto a los fondos del IESS (l.500 millones de dólares para gasto corriente, por la caída de los precios del crudo).
La insensata decisión de reafiliarse a la OPEP, en infantil suposición de que esta asociación petolera es enemiga de USA y Occidente, ahora le resulta inconveniente pues tiene que rebajar su ya magra cuota exportable en unos 40.000 barriles diarios de crudo. ¿Con qué viveza superará este dilema? Pues obligando a una empresa privada, la italiana AGIP, a que deje de producir en ese monto. ¿Cómo va ella a resarcirse de su inversión? Es problema de ellos, parece contestar Correa.
Casi simultáneamente a esta abusiva e irresponsable decisión, se anuncia que Petroecuador necesitará de 24.000 millones de dólares de inversión hasta el 2013 para que la producción se mantenga en el nivel de 200.000 b/d. El Estado está en quiebra. ¿Qué compañía inversora extranjera sería tan ingenua como para facilitar esa inversión en el Ecuador, ante tanta insensatez? Los chinos, a los cuales por algún momento Correa quería atraer, probablemente se sentirán ofendidos por el lenguaje empleado hoy en su perorata radial para reclamarles por un supuesto retraso en las obras portuarias de Manta. Las voy a patear (como a Odebrecht de Brasil) y desde ahora las obras portuarias pasan a control del Estado... dijo.
El arrogante líder, a este paso, corre peligro de quedarse sin amigos, sean o no amigos de los Estados Unidos.

1 comment:

Juan Montalvo said...

Atinado y exclarecedor como siempre, amigo Santiago. No escuché la kérmes del sábado pero, por lo que leo, temperar el tono no ha estado entre las new year's resolutions del mandamucho.