Saturday, August 29, 2009

¿SIGNOS DE DECADENCIA?

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, habla de “vientos de guerra” a propósito de la decisión de su colega colombiano Álvaro Uribe de acordar con los Estados Unidos una lucha conjunta para derrotar al terrorismo y el narcotráfico en Colombia.

El acuerdo consiste en recibir tropas militares especializadas de ese país en siete destacamentos colombianos para reemplazar una tarea similar de vigilancia que ejercía la misión norteamericana en la base aérea de Manta, que fue expulsada por el presidente ecuatoriano Rafael Correa.

Lo que las tropas yanquis quieren es atacar a la “revoluición bolivariana” iniciada en América Latina dijo el bufón Chávez secundado por los bufones menores Rafael Correa y Evo Morales, de Bolivia. Lo que induce a pensar que si Uribe y USA luchan contra el narcoterrorismo y si Chávez cree que eso es atacar a su “revolución”, entonces el narcoterrorismo y su revolución son una sola cosa.

Lo han tratado de negar, pero no convencen. En Bariloche acaba de celebrarse la conferencia de Unasur, grupo que quiere ofrecer resistencia al avance del “imperialismo yanqui” en Sud América. El propósito de la cita era lograr una condena al acuerdo militar de Colombia y simbólicamentre
“decapitar” a Uribe.

El director de la farsa fue Correa. Pero a él, su maestro Hugo Chávez y demás lacayos de Fidel y Raúl Castro les fue muy mal. Uribe salió ileso, Correa recibió un halón de orejas del brasileño Lula da Silva, presidente del Brasil y la conferencia, por mayoría, decidió apoyar la lucha común contra el narcoterrorismo como Uribe propuso.

En su campaña electoral Correa sostuvo que las FARC no eran terroristas sino “combatientes por la libertad” y que se los debía calificar como “grupo insurgente”. Fue en base a esa convicción que ya de presidente colaboró y protegió a esa agrupación, hasta el golpe certero de Uribe en Angostura.

Ahora, dado que la situación bilateral con Colombia y el mundo ha variado, Correa trata de variar su postura, pero nadie le cree. Se ha revelado como un fascista que cree que la salvación de los pueblos solo puede ser dada con gobiernos autoritarios que absorban todos los poderes, sin derecho a réplica.

En ese contexto, los correas y chávez tratan de bloquear a gobiernos que quieren combatir a guerrilleros y terroristas como las FARC, porque estas organizaciones quieren acabar con la democraica, una forma de gobierno antípoda a su cosmovisión centralista/estatista. Por ello en Bariloche Correa, líder temporal de Unasur, ensayó varias estrategias para debilitar el acuerdo militar, pero en todas ellas fracasó.

Tuvo la arrogancia de insinuar que el presidente Barack Hussein Obama, de Estados Unidos, se siente ante Unasur a explicar el porqué del acuerdo con Colombia, probablemente para recibir o no la aprobación. Poco lo faltó para ordenarle a Obama que vaya a su despacho, en Carondelet, para que ante él como líder del organismo, le pida su asentimiento.

Tampoco hubo eco a su otro pedido: que una misión de Unasur vigile el comportamiento de los tropas militares colombiano y gringas en los siete destacamentos del proyecto. Eso lo dijo después de divagar sobre la imposibilidad que hay de controlar la actividad de los militares gringos en bases como las de Manta.

El exabrupto de Correa se explica porque Obama es quien ahora está en la Casa Blanca. Su tarea de siete meses ha sido debilitar la imagen y la propia estima de los Estados Unidos, interna e internacionalmente. Sus discursos en El Cairo, América Latina y otros sitios se han centrado en pedir perdón por los pecados supuestamente cometidos por todos sus antecesores, sin exepción y prometer enmiendas y sumisión.

Es increíble cómo se ha doblegado ante Chávez y Castros y Correas en relación con Honduras. Zelaya salió de su país por decisión nacional, popular e institucional, pues no se quería permitirle que convierta al país en otro satélite de Chávez, como Ecuador, Bolivia y Nicaragua.

Chávez es enemigo confeso de los Estados Unidos y del capitalismo democrático. Quizás por esas razones Obama lo respalda en este caso de Honduras, de manera tan claramente anti democrática.

Insiste y presiona para que Zelaya sea restituído y corta visas y ayuda a Honduras como si fuera una nación infestada por el racismo, como lo fue Sudáfrica o de respaldo al terrorismo y el desafío a Naciones Unidas en cuanto a armamentismo nuclear, como Irán. De esa debilidad y de esa inconsistencia se aprovechan bufones como Chávez y Correa.

Al igual que Correa, Obama no cree que al terrorismo hay que llamarlo de esa manera. Por decisión suya ahora los Estados Unidos no están en guerra contra el terrorismo sino contra...no se sabe a ciencia cierta qué, pero no al terror de Al Qaida, Talibanes, Hamas y otros. Para reforzar su posición, ha dado pasos firmes para liquidar a la CIA.

Los pasos iniciales los dio Bill Clinton, quien siguió el proceso interno de debilitar la imagen patriótica de los Estados Unidos, nacido a raíz de los fracasos militares de Vietnam, guerra contra la expansión comunista que se perdió por influjo político de los “libs” o izquierdosos de Washington. Obama acaba de acusar formalmente a la CIA de torturar a los enemigos combatientes que fueron capturados en actos de guerra posteriores a 9/11 y apresados en Guantánamo (torturas “terribles” como lanzar humo a las narices de los angelitos, amenazarles con represalias que nunca llegaron a cumplirse, waterboarding que jamás les ahogó, etc). A los interrogadores y a los abogados que revisaron las leyes pidió que se les enjuice y condene (pero no a los congresistas de ambos partidos que autorizaron los procedimientos).

La CIA ya no hará trabajos de compilacion de información o inteligencia, esa labor será manejada por Obama desde la Casa Blanca. Fácil suponer los resultados, todos contrarios a la seguridad de los Estados Unidos, no obstante que la principal misión de los presidentes de ésta y de cualquier otra nación es garantizar la seguridad nacional.

Cheney, el vicepresidente de George W Bush, dijo que lo razonable habría sido que Obama ordene interrogar a los agentes de la CIA acerca de cómo lograron que USA esté protegida durante ocho años de nuevos ataques de los terroristas, para aprender. No para castigarlos.

Algo parecido debió haber hecho Correa con Uribe. Tras el ataque a la base de Angostura, lejos de romper relaciones diplomáticas con Colombia debió haberle pedido excusas por no haber cooperado para combatir al narcoterrorismo y prometido aunar esfuerzos a futuro para mejor cumplir esa misión de vital interés mutuo.

Pero Obama y Correa tienen otro concepto de la vida. Hablan ambos de defender la soberanía, pero evidentemente son antes “liberals” que el uno norteamericano y el otro ecuatorianos. Para su agenda liberal no tienen empacho en proteger al terrorismo o ceder ante enemigos como Chávez o Ahjmadinejad, destruir a la CIA y reducir el presupuesto de defensa.

En esa tendencia no sorprende la exaltación al “papa” liberal que acaba de morir, Edward Kennedy. Para los liberals, como que está camino de la canonización y santificación. Ted se decía católico pero fue el mayor propulsor del aborto, condenado sin derecho a negociación por la Iglesia Católica.

Le exaltan por defensor de los indefensos, pero por su influjo han muerto en el país unos 50 millones de seres humanos, los más indefensos de los indefensos: los nonatos. Y dejó morir a una joven mujer cuando el vehículo que él conducía, borracho, cayó en una laguna. Huyó mientras la mujer se asía del techo en el auto volcado, pugnando por respirar y salir, pero murió no ahogada sino sofocada.

El autor del accidente, al huir, pasó por una estación de bomberos y nada dijo. Fue a dormir y solo al día siguiente notificó a la Policía. ¿Cuál fue la sanción? Como en los mejores países del tercer mundo, apenas dos meses de “probation” o probatoria, es decir: nada.

Fidel Castro elogia a Ted Kennedy. Bien sabe él que su hermano Robert, como Procurador y en anuencia con John F., presidente, tenía listo un plan para asesinar a Fidel en uno de sus viajes rutinarios por Varadero, el 1 de diciembre de 1963. Por una serie de complejas imbriaciones relatadas con toda minuciosidad y documentación en el libro Legacy of Secrecy escrito por Lamar Waldron con Thom Hartmann (Counterpoint, 2008), el plan se frustró por el asesinato días antes de John F. Kennedy.

John F siempre estuvo arrepentido por el error de haber negado apoyo al plan Bahía de Cochinos para derrocar a Fidel Castro. Jrushov, con su estilo bufonesco, se mofó de él por su debilidad y pasó a instalar las bases de cohetería en Cuba, lo que a la postre John F. no lo permitió.

JFK quiso enmendar el error y superar la frustración con el plan del 1 de diciembre. Pero la mafia, indignada por los asedios de Robert, se adelantó en la venganza sin que nada tuvieran que ver ni Castro ni Oswald. Robert, muerto se hermano, retomó su liderazgo e intentó llegar a la presidencia entre otros motivos para culminar su lucha contra la mafia. Pero ésta se lo adelantó y lo asesinó en plena campaña en 1968.

La mafia tiene ramificaciones en varias ciudades clave y se interconectan entre sí, aunque en ocasiones batallen. Una de ellas y muy poderosa es la de Chicago. La misma que ha amamantado y criado a Obama. El mismo que ahora exalta a Ted Kennedy el cual es exaltado también por Fidel.

Obama, en su corto lapso de gobernante, ha arremetido contra el sistema de libre empresa y de libre competencia capitalista. Ha estatizado la banca y la industria automotriz y ahora está en feroz campaña por liquidar la libre competencia entre las aseguradoras de salud, para sustituirlos con un solo proveedor, el Estado.

Correa ha logrado triunfos espectaculres de parecida significación pero en otras dimensiones en el Ecuador debilitando a banca e industria, cercando a los medios de comunicación, anulando el equilibrio de poderes propio del sistema democrático. Extrañas coincidencias entre los líderes de un país diminuto y la primera potencia mundial, ambos unidos por la enfermedad del utopismo populista y demagógico de corte fascistoide.

Es probable que salgan adelante en sus empeños, pero no por mucho tiempo. La historia está plagada de gobernantes que abusan de su poder y lo llevan a extremos fascistas. El sacrificio de libertades y vidas humanas es inmenso y tanto, que terminan por sucumbir, para que una vez más la rueca de la historia de vueltas y se repita a si misma.

La sola excepción, por casi 250 años, han sido los Estados Unidos. Pero con Obama y la mafia que le rodea se agolpan las dudas. ¿Terminará este país sucumbiendo también ante la tiranía, como Roma, Grecia y tantos regímenes no solo de antiguos tiempos sino de los cercanos del pasado siglo e incluso del presente?


(P.S.: Como para aportar más argumentos a lo que esta nota contiene, el presidente Correa acaba de anunciar que clausurará Teleamazonas porque ha difundido un video que revela lo que todos han sospechado: que él ha amnipulado y manipula a los asambleistas a su antojo. Pero en lugar de tratar de explicar su conducta inmoral, acusa a Teleamazonas de “cloaca” por utilizar el derecho del pueblo a ser informado de todos, absolutamente de todos los actos del gobierno. No importa cómo se obtuvo la noticia, lo que importa es su contenido si es real, como así lo admite en su amenaza el propio autócrata gobernante. ¿Y de cuándo acá Correa tiene derecho a que se prohiba un programa de TV, esta vez de una peruana Bozzo? Para vergüenza nacional, el canal ya lo había suspendido adelantándose a los deseos del amo).

Wednesday, August 26, 2009

UNA COLABORACIÓN

(N del E): Un amable lector, César Mora, ha enviado un segundo comentario sobre la última nota del BLOG, con interesantes observaciones acerca de los orígenes de la decisión del presidente ecuatoriano Rafael Correa de crear comités de fuerza para defender su gobierno, cada día más autárquico. Se lo publica en su integridad y de manera preferencial. Gracias por la colaboración. SJ


Estimado Santiago:

No hay la menor duda de que lo mejor habría sido que Correa se quede en Cuba. El Ecuador verdadero le agradecería eternamente. Ahora se ve con claridad que el motivo principal de su viaje fue reunirse con su padre espiritual, Fidel, y afinar el funcionamiento de los comités de defensa de la revolución en nuestro país. Ya se sabe que hace pocos meses fue un grupo de militantes gobiernistas a Cuba para aprender los detalles de la operación de los tales comités, de manera que el anuncio de su implantación, con motivo del 10 de Agosto, en presencia de Chávez y Raúl Castro, no fue un ex abrupto del momento sino algo planificado con bastante anticipación. Sí fue un lapsus, sin embargo, el nombre de ‘comités para la defensa de la revolución’, tal cual se llaman en Cuba. Le traicionó el subconsciente y ahora tratan de remediarlo llamándolos ‘comités familiares’…

No se sabe hasta cuándo va a tolerar el pueblo ecuatoriano a este gobierno de dignatarios asociados a las FARC y al narcotráfico y que nos está empujando al despeñadero del totalitarismo castrista, sin haber llegado todavía al fondo en el que nos esperan la miseria generalizada más abyecta, tal como ocurre ahora en Cuba, después de 50 años de desastre; el engaño y la mentira convertidos en dogmas de fe, la destrucción de la empresa privada que estamos comprobando a diario y, no menos grave, el silenciamiento de toda posible opinión, no se diga oposición al régimen de oprobio que sufrimos. Un pueblo de mendigos dependientes de los mendrugos que le arroja el gobierno es muy fácil de gobernar.

¿Tendrán éxito los comités de defensa de la revolución? ¿Podrá soportar la población el amedrentamiento e ingerencia de fanáticos violentos, como sin duda serán, en la vida de cada ciudadano?

A esto nos está conduciendo el gobierno de las mentes “razonablemente listas”, uñas lúcidas y bolsillos ardientes.

César Mora.

Sunday, August 23, 2009

QUE SE QUEDE EN CUBA

El presidente Rafael Correa (acompañado de su mujer belga, a quien el pueblo ecuatoriano casi no conoce ) ha ido a visitar a Fidel Castro en Cuba para escuchar genuflexo sus sermones y consejos y allí se quedará hasta el jueves.

¿Por qué no se queda allí indefinidamente? Fidel y Raúl le darían asilo político sin vacilar. Para consolarse podría hacerse acompañar por el trotamundos Zelaya, que viaja sin descanso sufragado por Hugo Chávez. Y por su redil de esbirros de nombres lenín, marx, patiño y demás.

Porque Correa no está calificado para seguir de Presidente. Le ha mentido al pueblo en todas las áreas. En lo interno ha destruido todo vestigio de institucionalidad democrática y ha destrozado la economía hasta generar estancamiento y recesión, con 0 inversión privada interna y externa.

En lo externo ha hecho el ridículo y mentido. El diario El Nuevo Heraldo de Miami publicó ayer más detalles que confirman que Correa se alió a las FARC, las protegió, recibió dinero para su campaña electoral y delegó al ministro de Seguridad Gustavo Larrea para que dialogue con Raúl Reyes, segundo en jerarquía del grupo narcoterrorista.

Raúl Reyes murió el 1 de marzo del años pasado por el bombardeo de la Fuerza Aérea colombiana a la base de Angostura en suelo ecuatoriano. Los atacantes hallaron tres computadoras portátiles con información acerca de los vínculos de las FARC con Chávez y Correa.

Estos dos gobernantes, discípulos ambos de los Castro de Cuba, dijeron a coro que la información de las computadoras era forjada. Pero ahora no solo la Interpol dice que la información es cierta sino el propio líder de las FARC, Manuel Marulanda, Tiro Fijo. El Nuevo Herald, filial del MIami Herald, ofrece datos irrefutables sobre el tema.

Son fragmentos adicionales del video del Mono Jojoy que ya fue hecho público parcialmente con anterioridad. Allí el Mono Jojoy lee el testamento de Tiro Fijo en el que se lamenta no solo de la muerte de Reyes sino sobre todo de la pérdida y captura de la información de las computadoras, golpe del cual difícilmente podrán recuperarse las FARC, dice.

La nota del Herald, no transcrita en el Ecuador, puede leerse en este link. No cabe dudar más de las mentiras de Correa sobre sus nexos y simpatía con las FARC. Para mayor abundamiento hace pocos días confesó Larrea que Correa si conocía de sus movimientos y diálogos con Raúl Reyes, se entiende que en Angostura y no en ningún “tercer país” que él, Larrea, dice “no está autorizado a revelar”. Correa se ha negado sistemáticamente a aceptar lo obvio, que él si sabía lo que su ministro de Seguridad hacía, decía y negociaba.

Si se prueba que Larrea dialogó sin autorización con Reyes, tendrá que ser juzgado por traición a la Patria dijo hace un par de meses Correa y lo reiteraron otras autoridades. Pero ahora las pruebas internas y externas son más que suficientes. Lo problemático es que en el Ecuador no hay ni Congreso ni Tribunal de Garantías Constitucionales ni Corte Suprema independientes, por lo cual ningún enjuiciamiento es factible al menos en las actuales circunstancias.

Pero la suerte del gobierno de Correa está echada. Comienza a heder por todas las costuras. Ello explica que esté organizando “camisas pardas” al estilo nazi para defenderlo e impedir que brote, se ligue y robustezca la oposición. Y por eso sigue implacable en su asedio a los pocos medios y a los periodistas que aún se mantienen independientes y analíticos.

Su hostilidad con el Presidente Álvaro Uribe explica también su posición débil y defensiva. Acepta reanudar diálogos con él para que las relaciones diplomáticas que él rompió unilateralmente se restablezcan, pero pone sus condiciones. ¿Cuáles? Que pare de acusarlo de cómplice de las FARC y que prometa no organizar nuevos “ataques preventivos” como el de Angostura.

En cuanto a lo primero, Uribe no puede comprometerse a censurar nuevas informaciones que probablemente continuarán apareciendo y que prueben que Correa (con Chávez) ha estado estrechamente vinculando con las FARC. En cuando a descartar la teoría de la “guerra preventiva”, a quien toca evitarla es a Correa, no a Uribe.

El primer mandato de todo gobernante es garantizar la seguridad interna y externa del país. Correa sabía de la existencia de la base de Angostura (su colega vecino le dio información al respecto) pero no solo no la prohibió, sino que la amparó y permitió que allí se reuna con Reyes su ministro Larrea y facilitó que viajen allá becarios de las FARC a la reunión en Quito de “solidaridad boliviariana” celebrada con el auspicio también de Chávez.

Las FARC buscan derrocar por la fuerza a Uribe para abolir el sistema democrático de Colombia, algo que han conseguido Chávez y Correa en sus respectivos países por la vía del chantaje de la ley. Las FARC han asesinado a millares de seres inocentes y han causado y causan zozobra permanente en la sociedad colombiana.

La obligación constitucional y moral de Uribe era abatir a los insurgentes amparados por el vecino gobernante en suelo ecuatoriano. Si a Correa le ha dolido tanto la muerte de los narcoterroristas y quiere evitar otro golpe certero de los militares colombianos, la fórmula es simple: no los proteja, no les ofrezca tierra ecuatoriana como “santuario”. Ni a Uribe ni a quien le suceda les interesará atacar a ecuatorianos pacíficos, con quienes prefiere por tradición histórica, mantener buenas relaciones.

En suma, si Rafael Correa ama realmente al pueblo ecuatoriano más que a si mismo, más que a su desenfrenado apetito de poder y adulación, bien haría entonces en solicitar asilo indefinido en el paraíso insular. Dice que su rodilla está mala (¿acaso en el Ecuador ya no hay buenos “fregadores” que hubieran podido aliviarlo?).

Pero lo que no está bien es su cabeza, su ego, su visión de la historia. Michael Savage, popular director del programa radial Savage Nation en los Estados Unidos y autor de varios libros sostiene que el liberalismo (entiéndase izquierdismo pro fascista y comunista) es una enfermedad mental.

Viene oportuno el artículo que Gonzalo Maldonado publica hoy en El Comercio en el que se analizan las posibles causas de esa enfermedad. Lástima que Cuba no sea el lugar más aconsejado para tratamiento y cura de este mal.


Sunday, August 16, 2009

URIBE/CORREA, QUÉ DIFERENCIA

¿Por qué el Ecuador no ha tenido la suerte de contar con un líder de la calidad de Álvaro Uribe para la presidencia de la República en estos últimos 30 años de tan débil y mal formada democracia?

En ese lapso ha habido presidencias efímeras, por muerte en el caso de Jaime Roldós o por expulsiones forzadas como las de Mahuad y Bucaram. Ninguno evidenció calidad de estadista capaz de dejar en herencia un respeto por la institucionalidad democrática y el sistema. Al contrario, el legado fue de incredulidad y escepticismo en la política.

De ello se aprovechó Rafael Correa. Con su discurso demagógico y la falta de contendores talentosos, engañó a la mayoría y se asió del poder. Pero una vez en él, su propósito no fue corregir los yerros de los líderes que lo antecedieron para fortalecer la democracia, sino lo opuesto.

Sus maniobras para aplastar al Congreso y forjar una asamblea para que apruebe la farragosa nueva Constitución, le han conferido poderes cuasi omnímodos a través de un proceso con fachada democrática.

Álvaro Uribe es la antípoda de Correa como presidente de Colombia. No es un orador de masas, pero lo que dice convence y lo que se propone hacer, lo hace. Ronald Reagan era conocido como el Gran Comunicador por su facilidad oratoria. Pero él decía que no era un gran comunicador, sino comunicador de cosas grandes.

Tanto Uribe como Reagan tienen el don de decir cosas sensatas con claridad y sentido común, lo que es aceptado por la mayoría. Y traducen su pensamiento en acciones positivas. Reagan guió a sus conciudadanos a recuperar el optimismo y salir del sentimiento de frustración y derrotismo de los gobiernos demócratas anteriores. Y reanimó la economía cortando impuestos, proteccionismos y subsidios, impulsando así el libre mercado, único mecanismo de creación real y multiplicación de riqueza.

Uribe ha hecho lo propio. Su meta central fue reafirmar el patriotismo y la fe en Colombia en sus compatriotas, abandonando la posición cómplice de su antecesores con la narcoguerrilla. Suprimió concesiones territoriales y diálogos con los dirigentes de las FARC y prometió, en cambio, lo único que cabe con el terrorismo: derrotarlo por la fuerza de las armas hasta el rendimiento incondicional.

Los frutos han comenzado a beneficiar a los colombianos. Hay más paz y más posibilidad de producir, invertrir y comerciar, al punto que Colombia es una de las naciones con mayor tasas de crecimiento e inversión en la región. La lucha no ha concluído, pero la victoria está del lado de la ley y la democracia.

En el combate contra la narcoguerrilla, Uribe ha tenido que enfrentar no solo a enemigos internos sino externos, los gobiernos de Venezuela y Ecuador protectores de las FARC. Ecuador inclusive admitió en su suelo a los narcos colombianos, siendo el caso más notorio el del campamento de Angostura.

Uribe advirtió en varias ocasiones a Correa sobre la presencia en el Ecuador de los narcoterroristas, enviándole coordenadas precisas de las posiciones geográficas. El silencio cómplice fue la única respuesta.

A Uribe no le quedó otra alternativa que bombardear el 1 de marzo del año pasado al campamento, situado en la frontera. La acción fue impecable y lo fue porque Correa jamás se enteró de ella para prevenir a las FARC. Murió el líder Raúl Reyes y una veintena más de terroristas, rescatándose documentos clave de 3 computadoras portátiles.

Correa se enloqueció de angustia y emprendió precipitada gira por varios países de América Latina y Europa en busca de apoyo a su protesta por el ataque y muerte de sus terroristas protegidos. Nadie le prestó oídos. Rompió relaciones diplomáticas con Colombia y siguió protestando por el ataque. Lo hizo en una reunión de la OEA en Santo Domingo y allí Uribe se vio forzado a pedirle perdón por el ataque, pero sin jamás expresale su arrepentimiento por la decisión.

Correa sigue quejumbroso y Uribe se ha visto impelido a recordarle que ya le pidió perdón en Santo Domingo. Correa ahora dice que acepta este “segundo” perdón y que está dispuesto a reiniciar diálogos para una eventual normalización de relaciones entre los dos países.

Pero con una condición, ha dicho Correa: que Uribe ya no le haga acuerdo de las FARC...¿Qué insinúa con ello? ¿Que Uribe incinere los discos duros de la computadoras de Reyes que prueban que Correa y Hugo Chávez se negociaban con las FARC? ¿Que silencie nuevos testimonios que se van a presentar con el tiempo? Es una postura equivalente a la de los islámicos extremistas como Ahmadenejad de Irán (compinche de ambos sujetos) que pide negar el Holocausto. El Holocausto es un hecho histórico que no se puede negar. Los vínculos de Chávez y Correa con las FARC lo son también, en otra magnitud. No está en Uribe poder ignorarlos.

Correa, según los documentos, se comprometió a expulsar a los militares norteamericanos de la base anti narcótica de Manta y lo cumplió. Ahora esa misión se traslada a Colombia. Los militares yanquis estarán en siete campamentos y actuarán de consuno con los militares colombianos para seguir combatiendo al narcoterrorismo.

Los protectores de las FARC, para sorpresa de nadie, protestaron contra este acuerdo insinuando que es una maniobra imperialista para sojuzgar a las naciones del “socialismo del siglo XXI”. Para despejar dudas ante tan ridículas afirmaciones, Uribe también emprendió una rápida gira por varias naciones de la región y los resultados fueron, qué contraste con Correa, de aceptación o respaldo al convenio militar.

La popularidad de Uribe sigue en el 75%, la de Correa comienza a declinar. Muchos quisieran que Uribe acepte la presión para buscar una tercera reelección. La conseguiría, pero ello atentaría contra el principio de la democracia alternativa (George Washington, a quien se lo queria hacer rey, no aceptó una tercera elección. Pero fue el demócrata Franklin D Roosevelt quien vició ese principio aceptando ser reelecto 4 veces...).

Correa ha sido reelecto una vez y quisiera serlo muchas más, como su mentor Chávez. Pero al paso que va, acaso no complete ni su segundo mandato. Para sustituirlo ¿se vislumbra por algún lado a alguien con los atributos de Uribe?

Si la respuesta es negativa y si no cuaja lo de la tercera en su país ¿no querrá Uribe “darse un saltito” al Ecuador “para dar gobernando” al país por unos cuatro u ocho añitos?

Sunday, August 9, 2009

BRUMAS DEL 10 DE AGOSTO

La primera prolongación del mandato de Rafael Correa (sin duda habrá otras, como en Venezuela) se festejará mañana en coincidencia con el bicentenario del “Primer Grito de la Independencia” de España.

Esa coincidencia fue forzada por Correa. Es uno más de los cambios que ha forzado en el sistema democrático del Ecuador para acercentar su poder más allá de todo control de otras funciones estatales y agencias como el Congreso, la Contraloría o el Tribunal Electoral y la Justicia.

La coincidencia conlleva sin embargo simbolismos que reflejan las debilidades, contradicciones e indefiniciones asociadas con el nacimiento de la República hace dos centurias y que explican la imposiblidad de que en el Ecuador se cimente una verdadera democracia.

Hace 200 años lo que hubo es una rebelión contra las autoridades coloniales, no una revolución ni guerra ni siquiera una proclama de independencia de España. Se registró una sustitución de burócratas españoles por criollos, todos aristócratas muy avenidos con el sistema imperante.

Correa y sus áulicos, incluidos historiadores, decidieron que la re posesión del segundo mandato se celebre del 10 de Agosto porque consideran que ese fue, hace 200 años, el “primer grito de independencia” y que con él se va a concretar el segundo. Pero en ninguno de los dos casos cabe hablar de independencia.

Es bueno refrescar la memoria volviendo a leer el Acta del 10 de Agosto, no siempre divulgada y estudiada a plenitud. Nada revela la voluntad de desarraigarse de la corona española con el propósito de establecer una nueva cosmovisión, una nueva forma de vida para abolir obstrucciones al desarrollo de la libertad individual impuestas desde dentro y desde fuera en la Colonia.

Los rebeldes juraron fidelidad a la Corona amenazada por Napoleón e inclusive mantuvieron intocables los título nobiliarios y los estamentos sociales y la urdimbre política y económica de servidumbre que colocaba en el pináculo de la dominación a unos pocos, por sobre la miseria de los más.

No hay que hurgar muy profundo ni escudarse en títulos académicos de historia y ciencia política para comprender por qué el movimiento del 10 de agosto de 1809, en tales circunstancias, marchó a la deriva y se extinguió un año más tarde, con la masacre del 2 de agosto de 1810.

La rebelión no podía prosperar por falta de definición. ¿Cómo era dable que se afiance si al tiempo de levantarse contra la autoridad le rendía promesas de fidelidad? Lo que ocurrió era inevitable. La Corona no podía permanecer impasible y prontamente organizó milicias para aplastar la insurrección, lo que obtuvo sin resistencia.

Obsérvese, en contraste, lo ocurrido con las 13 Colonias americanas. Los líderes juzgaron que los abusos de la Corona británica eran intolerables, que no se admitieron sus reclamos ni cambios y se lanzaron a la guerra por la independencia. La lucha fue muy desigual frente a la primera potencia militar del momento, pero prevaleció la inteligencia, la convicción y la fe de los alzados en armas contra la tiranía.

El consenso en el movimiento no brotó de inmediato. Hubo intensas discusiones en las que participaron eso si los cerebros más brillantes de las 13 Colonias y tras ellas se convino en que no había otra alternativa que cortar de cuajo el cordón umbilical con el Reino Unido.

Ello no significó que se echara por la borda lo positivo de la cultura británica, como su ya centenario concepto de democracia, el sistema jurídico ejemplar, las concepciones sustantivas en economía. Pero no hubo ambigüedades ni titubeos y en cuanto a los estamentos aristocrárticos feudales de la vieja Europa, se los abolió de una plumada.

La Declaración de Independencia de los Estados Unidos es un documento luminoso, de vigencia y actualidad permanentes, que ha sido la guía para construir política y culturalmente a este país. Esa Declaración inspiró a los fundadores para redactar la Constitución e introducir enmiendas de tanta trascendencia como las contenidas en el Bill of Rights.

El documento básicamente establece el principio inmodificable de que la soberanía radica en el pueblo, el cual de mutuo propio delega autoridad temporal a los gobiernos cuya misión es cumplir y hacer cumplir las leyes emanadas de un cuerpo distinto, la legislatura y que en litigio tienen que ser conocidas y resueltas por otra función, la judicial.

En la convicción de que los seres humanos no son ángeles, ya que si lo fueran no se requeriría de gobiernos, el sistema contempla el balance y contrapeso entre las tres funciones. Ha operado hasta la fecha con gran eficiencia, con excepciones propias de la condición de imperfectas que tiene toda institución creada por el hombre.

La Declaración de la Independencia de las 13 Colonias Americanas del 4 de Julio de 1776 fue real y concluyente. El Acta del 10 de Agosto de 1809 no fue una declaración de indpendencia, fue cualquier otra cosa y no una definición. Lo del 4 de Julio se transformó en guerra y en victoria y en años subsiguientes en la formación de una república federal que creció en geografía y en poder cultural, militar y económico, sin alterar el texto originario de su Constitución, salvo pocas (27) enmiendas que la complementan.

Con respecto a la Real Audiencia de Quito, tuvieron que transcurrir 13 años para que se fragüe algo distinto a lo que querían los próceres del 10 de Agosto: la independencia de España, con las victorias guerreras del 9 de Octubre de 1820 y del 24 de Mayo de 1822. Mas las estructuras sociales no se alteraron, excepto el cambio de autoridad.

Correa habla de una segunda independencia mediante la “radicalización del socialismo del siglo XXI”. La independencia americana creó una nueva forma de gobierno, la más eficaz y la más flexible, dinámica y libre. La que ha existido en el Ecuadro hasta Correa tenía debilidades, pero pudo ser perfectible como lo es toda democracia.

Correa no piensa así. No confía en la libertad. Cree que la búsqueda de la felicidad no debe estar en manos del libre albedrío de los hombres, como expresa la Declaración americana, sino racionada, medida y concedida por el gobierno y sus regulaciones. Su utopía es la igualdad de resultados, no la igualdad de oportunidades.

No es mito de él, es mito de todos los mitómanos que han transitado por la historia. En tiempos modernos se llama estatismo, sea fascismo, comunismo, castrismo, chavismo y ahora correismo. Pretenden la igualdad por la fuerza y con la supresión de las libertades de expresión, selección y propiedad privada.

Se anuncia que habrá 14 jefes de Estado en la ceremonia de re posesión de Correa. Entre ellos Raúl Castro, colocado como gobernante de Cuba por Fidel, en el poder “igualador” que tanto admira Correa desde enero de 1959. En Cuba lo que se ha igualado es la pobreza con falta de libertad.

También estará Zelaya, el cantinflesco presidente hondureño al que se le impidió a tiempo convertirse en otro dócil de Hugo Chávez, como Correa. Sólo falta Ahjmadenejad o un delegado del enfermo Kim de Corea del Norte.

La segunda independencia buscada por los Chávez y Correas es otro obstáculo para consolidar la endeble democracia de estos países. A la independencia hay que entenderla como ruptura de tiranías. La tiranía la representaban otrora las monarquías, hoy la representan los gobiernos autocráticos de cualquier ideología.

A mayor concentración de poder de un gobierno, menor goce de libertades individuales. Libertad para pensar, inventar, disentir, educarse, ahorrar, invertir, transitar y comerciar. La libertad no es negociable, no es transable decían los promotores de la República americana. No lo entendieron así los próceres del 10 de Agosto y siguen sin entenderlo los que apoyaron y apoyan a Correa.



(Seguidamente se reproducen el Acta del 10 de Agosto y la Declaración de Independencia de los Estados Unidos. Vale la comparación)


Acta del 10 de agosto de 1809

Nos, los infrascritos diputados del pueblo, atendidas las presentes circunstancias

críticas de la nación, declaramos solemnemente haber cesado en sus funciones los

magistrados actuales de esta capital y sus provincias; en su virtud, los del barrio del Centro

o Catedral elegimos y nombramos por representantes de él a los Marqueses de Selva Alegre y

Solanda, y lo firmamos.- Manuel de Angulo, Antonio Pineda, Manuel Cevallos, Joaquín de la

Barrera, Vicente Paredes, Juan Ante y Valencia.

Los del barrio de San Sebastián elegimos y nombramos por representantes de él a don Manuel

Zambrano, y lo firmamos.- Nicolás Vélez, Francisco Romero, Juan Pino, Lorenzo Romero,

Manuel Romero, Miguel Donoso.

Los del barrio de San Roque elegimos y nombramos por representantes de él al Marqués de

Villa Orellana y lo firmamos.- José Rivadeneira, Ramón Puente, Antonio Bustamante, José

Alvarez, Diego Mideros.

Los del barrio de San Blas elegimos y nombramos por representantes de él a don Manuel de

Larrea y lo firmamos.- Juan Coello, Gregorio Flor de la Bastida, José Ponce, Mariano

Villalobos, José Bosmediano, Juan Unigarro y Bonilla.

Los del barrio de Santa Bárbara elegimos y nombramos por representantes de él al Marqués

de Miraflores y lo firmamos.- Ramón Maldonado, Luis Varas, Cristóbal Garcés, Toribio Ortega,

Tadeo Antonio Arellano, Antonio Sierra.

Por el barrio de San Marcos elegimos y nombramos por representantes de él a don Manuel

Mateu y lo firmamos.- Francisco Javier Ascázubi, José Padilla, Nicolás Vélez, Nicolás Jiménez,

Francisco Villalobos, Juan Barreto.

Declaramos que los antedichos individuos, unidos con los representantes de los Cabildos de

las provincias sujetas actualmente a esta gobernación y a las que se unan voluntariamente a

ello en lo sucesivo, como son Guayaquil, Popayán, Pasto, Barbacoas y Panamá, que ahora

dependen de los virreinatos de Lima y Santa Fe, las cuales se procurará atraer,

compondrán una Junta Suprema que gobernará interinamente a nombre y como

representante de nuestro soberano, el señor Fernando Séptimo, y mientras Su

Majestad recupere la península o viniere a imperar en América, elegimos y

nombramos por Ministros o Secretarios de Estado a don Juan de Dios Morales, a don

Manuel Quiroga y a don Juan de Larrea, el primero para el despacho de Negocios

Extranjeros y de la Guerra, el segundo para el de Gracia y Justicia y el tercero para el de

Hacienda; los cuales como tales serán individuos natos de la Junta Suprema. Esta tendrá un

Secretario Particular con voto y nombramos como tal a don Vicente Alvarez.- Elegimos y

nombramos por representantes por Presidente de ella al Marqués de Selva Alegre.

La Junta como representante del Monarca tendrá el tratamiento de Majestad, su

Presidente el de Alteza Serenísima; y sus vocales el de Excelencia, menos el

Secretario Particular a quien se le dará el de Señoría.- El Presidente tendrá por ahora y

mientras se organizan las rentas del Estado seis mil pesos de sueldo, dos mil cada vocal

y mil el Secretario Particular. ---Prestará juramento solemne de obediencia y fidelidad al

Rey en la Catedral inmediatamente y lo hará prestar a todos los cuerpos constituidos así

eclesiásticos como seculares. Sostendrá la pureza de la religión, los derechos del Rey,

los de la Patria y hará guerra mortal a todos sus enemigos, principalmente franceses,

valiéndose de cuantos medios o arbitrios honestos les sugiriesen el valor y la prudencia para

lograr el triunfo. Al efecto y siendo absolutamente necesaria una fuerza militar para mantener el

Reino en respeto, se levantará prontamente una falange compuesta de tres batallones de

infantería sobre el pie de ordenanza y montada la compañía de granaderos: quedando por

consiguiente reformadas las dos de infantería y el piquete de dragones actuales.

El jefe de la falange será Coronel y nombramos tal a don Juan Salinas, a quien la Junta habrá

de reconocer inmediatamente. Nombramos de auditor general de guerra con honores de

Teniente Coronel, tratamiento de Señoría y mil quinientos pesos de sueldo a don Juan Pablo

Arenas y la Junta le hará reconocer. El Coronel hará las propuestas de los oficiales, los

nombrará la Junta, expedirá sus patentes y las dará gratis el Secretario de la Guerra. Para que

la falange sirva gustosa y no le falte lo necesario, se aumentará la tercera parte sobre el sueldo

actual desde soldado arriba.

Para la más pronta y recta administración de justicia creamos un Senado de ella

compuesto de dos salas Civil y Criminal con tratamiento de Alteza. Tendrá a su cabeza un

Gobernador con dos mil pesos de sueldo y tratamiento de Usía Ilustrísima. La Sala de los

Criminal, un Regente subordinado al Gobernador con dos mil pesos de sueldo y tratamiento de

Señoría; los demás ministros con el mismo tratamiento y mil quinientos pesos de sueldo;

agregándose un Protector General de Indios con honores y sueldo de Senador. El Alguacil

Mayor con tratamiento y sus antiguos emolumentos.- Elegimos y nombramos tales en la forma

siguiente: Sala de lo Civil: Gobernador don José Javier Ascázubi; Decanos, don Pedro Jacinto

Escobar, don José Salvador, don Ignacio Tenorio, don Bernardo de León.- Fiscal, don Mariano

Merizalde.- Sala de lo Criminal: Regente: don Felipe Fuertes Amar, decano, don Luis Quijano.-

Senadores, don José del Corral, don Víctor de San Miguel, don Salvador de Muergueitio.-

Fiscal, don Francisco Javier de Salazar.- Protector, don Tomás Arechaga.- Alguacil Mayor, don

Antonio Solano de la Sala.- Si alguno de los sujetos nombrados por esta Soberana diputación

renunciare al cargo sin justa y legítima causa, la Junta la admitirá la renuncia, si lo tuviere por

conveniente, pero se le advertirá antes que será reputado como tal mal patriota y vasallo y

excluido para siempre de cualquier empleo público.

El que disputare la legitimidad de la Junta Suprema constituida por esta acta tendrá toda

libertad bajo la salvaguardia de las leyes de presentar por escrito sus argumentos y una vez

que se declaren fútiles, ratificada que sea la autoridad que le es conferida se le intimará a

prestar obediencia lo que no haciendo se le tendrá y tratará como reo de Estado.

Dado y firmado en el Palacio Real de Quito, a diez de agosto de mil ochocientos nueve.-

Manuel de Angulo – Antonio Pineda – Manuel Cevallos – Joaquín de la Barrera – Vicente

Paredes – Juan Ante y Valencia – Nicolás Vélez – Francisco Romero – Juan Pino – Lorenzo

Romero – Manuel Romero – Miguel Donoso – José Rivadeneira – Ramón Puente – Antonio

Bustamante – José Alvarez – Juan Coello – Gregorio Flor de la Bastida – José Ponce –

Mariano Villalobos – Diego Mideros – Vicente Melo – José Bosmediano – Juan Guijarro y

Bonilla – Ramón Maldonado – Luis Vargas – Cristóbal Garcés – Toribio Ortega – Tadeo

Antonio Arellano – Antonio de Arellano – Antonio de Sierra – Francisco Javier de Ascázubi –

José Padilla – Nicolás Jiménez – Francisco Villalobos – Juan Barreto.



X-X-XX-X-X-X-X-X-X-X-X


La declaración de la independencia de los Estados Unidos de América

Acción del Segundo Congreso Continental, 4 de julio de 1776
La Declaración Unánime de los trece Estados unidos de América

CUANDO en el Curso de los Acontecimientos humanos se hace necesario que un Pueblo disuelva los Lazos Políticos que lo han vinculado a otro y adopte entre los Poderes de la Tierra la Posición igual y separada a la que las Leyes de la Naturaleza y de la Naturaleza Divina le dan derecho, un Respeto apropiado por la Opinión de la Humanidad exige que dicho pueblo declare los motivos que lo impulsan a la Separación.

Sostenemos que estas Verdades son evidentes en sí mismas: que todos los Hombres son creados iguales, que su Creador los ha dotado de ciertos Derechos inalienables, que entre ellos se encuentran la Vida, la Libertad y la Búsqueda de la Felicidad. Que para asegurar estos Derechos se instituyen Gobiernos entre los Hombres, los cuales derivan sus Poderes legítimos del Consentimiento de los Gobernados; que el Pueblo tiene el derecho de cambiar o abolir cualquier otra Forma de Gobierno que tienda a destruir estos Propósitos, y de instituir un nuevo Gobierno, Fundado en tales Principios, y de organizar sus Poderes en tal Forma que la realización de su Seguridad y Felicidad sean más viables. La Prudencia ciertamente aconsejará que Gobiernos establecidos por bastante tiempo no sean cambiados por Causas triviales y efímeras; y como toda Experiencia lo ha demostrado, la Humanidad está más dispuesta al sufrimiento mientras el Mal sea soportable, que al derecho propio de abolir las Formas a las que se ha acostumbrado. Pero cuando una larga Sucesión de Abusos y Usurpaciones, todos ellos encaminados de manera invariable hacia el mismo Objetivo, revelan la Intención de someter a dicho Pueblo al absoluto Despotismo, es su Derecho, es su Deber, derrocar a tal Gobierno y nombrar nuevos Guardianes de su futura Seguridad. Tal ha sido el paciente Sufrimiento de estas Colonias; y tal es hoy la Necesidad que las obliga a modificar sus anteriores Sistemas de Gobierno. La Crónica del actual Rey de Gran Bretaña es una Crónica de repetidas Injurias y Usurpaciones, todas ellas dirigidas al Establecimiento de una Tiranía absoluta sobre estos Estados. Para probar esto, expongamos los Hechos a un Mundo sincero.

ÉL ha negado su Sanción a Leyes que son íntegras y necesarias para el Bienestar público.

HA prohibido a sus Gobernadores aprobar Leyes de inmediata y apremiante Importancia, a no ser que sea pospuesta su Operación hasta que se obtenga su Sanción; y una vez suspendidas, se ha negado por completo a prestarles atención.

SE ha negado a aprobar otras Leyes para el Asentamiento de Grandes Distritos populares, a menos que esa Gente renunciara a su Derecho de Representación en la Legislatura, un Derecho inestimable para ellos y sólo temible para los Tiranos.

HA convocado a los Cuerpos Legislativos en Sitios inusuales, incómodos y alejados del Depósito de sus Registros públicos, con el solo Propósito de fatigarlos para que cumplan con sus Requerimientos.

HA disuelto las Cámaras de Representantes una y otra vez, por oponerse en forma Decidida a sus Intromisiones en los Derechos del Pueblo.

HA rehusado durante mucho Tiempo, luego de estas Disoluciones, motivar a que otros sean electos, por lo cual los Poderes Legislativos, incapaces de ser Aniquilados, han regresado sin restricciones al Pueblo para su ejercicio; entretanto, el Estado permanecía expuesto a peligros de Invasión externa, y de Convulsiones en el interior.

SE ha esforzado por desalentar la Población de estos Estados; para ese Propósito ha obstaculizado las Leyes de Naturalización de Extranjeros; se ha negado a aprobar otras que alienten la Migración, y ha aumentado las exigencias para las nuevas apropiaciones de Tierras.

HA obstruido la Administración de Justicia, al negarse a emitir su Sanción a las Leyes destinadas a establecer Poderes Judiciales.

HA vuelto dependientes a los Jueces, al lograr que su permanencia en el cargo y el Monto y Pago de sus Salarios dependan exclusivamente de su Voluntad.

HA creado un Sinnúmero de nuevos Despachos, y enviado a nuestras tierras un Enjambre de Funcionarios para hostigar a nuestro Pueblo y apropiarse de sus Frutos.

HA mantenido entre nosotros, en Tiempos de Paz, Ejércitos Permanentes sin el consentimiento de nuestras Legislaturas.

HA causado que el poder Militar se vuelva independiente y se halle por encima del Poder Civil.

SE ha unido a otros para imponernos una Jurisdicción extraña a nuestra Constitución y no reconocida por nuestras Leyes al otorgar su Sanción a sus Actos de pretendida Legislación:

PARA acuartelar numerosos Contingentes de Tropas Armadas entre nosotros:

PARA protegerlas, mediante un Tribunal ficticio, del Castigo por cualquier Asesinato que han de cometer entre los Habitantes de estos Estados:

PARA obstruir nuestro Comercio con otras Partes del Mundo:

PARA aplicarnos Impuestos sin nuestro Consentimiento:

PARA privarnos, en muchos Casos, de los Beneficios de un Juicio por Jurado:

PARA llevarnos a ultramar para ser juzgados por presuntos Delitos:

PARA abolir el Sistema libre de Leyes Inglesas en una Provincia aledaña, estableciendo allí un Gobierno arbitrario, y extendiendo sus Fronteras a fin de convertirlo de inmediato en Ejemplo y adecuado Instrumento para introducir el mismo Gobierno absoluto en estas Colonias:

PARA eliminar nuestras Cartas Constitucionales, abolir nuestras Leyes más valiosas, y alterar fundamentalmente las Formas de nuestros Gobiernos:

PARA suspender nuestras propias Legislaturas y declararse investidos del Poder para legislar por nosotros en todos y cada uno de los Casos.

HA abdicado de su Gobierno sobre estas tierras al declararnos fuera de su Protección y librar una Guerra en contra nuestra.

HA saqueado nuestros Mares, asolado nuestras Costas, quemado nuestros Poblados y destruido las Vidas de nuestra Gente.

EN este Momento ha dispuesto el envío de grandes Ejércitos de Mercenarios extranjeros para culminar su Obra de Muerte, Desolación y Tiranía, iniciada con incidentes de Crueldad y Perfidia difícilmente igualados en las Épocas de mayor barbarie e indignos del Juicio de una Nación civilizada.

HA obligado a nuestros Conciudadanos apresados en alta Mar a levantarse en Armas contra su Patria, a convertirse en Verdugos de sus Amigos y Hermanos, o a caer a Manos de estos.

HA alentado Insurrecciones internas en nuestra contra, y ha tratado de inducir a los Habitantes de nuestras Fronteras, los despiadados Indios Salvajes, cuya conocida Regla de Lucha es la Destrucción sin distinción de Edad, Sexo ni Condición.

EN cada etapa de estas Opresiones, nosotros hemos Solicitado Compensación en los Términos más humildes: Nuestras repetidas Peticiones sólo han sido respondidas con más Injurias. Un Príncipe, cuyo Carácter está por tanto marcado por cada uno de los actos que definirían a un Tirano, es incapaz de ser el Soberano de un Pueblo libre.

TAMPOCO nos han hecho falta las atenciones hacia nuestros Hermanos británicos. De tanto en tanto, les hemos advertido sobre los Intentos de su Legislatura por ampliar una injustificable Jurisdicción sobre nosotros. Les hemos recordado las Circunstancias de nuestra Emigración y Colonización aquí. Hemos apelado a su natural Justicia y Magnanimidad, y les hemos implorado, por los Lazos de nuestros Antepasados comunes, que rechacen semejantes Usurpaciones, las cuales interrumpían en forma inevitable nuestras Conexiones y Correspondencia. Ellos también han sido sordos a la Voz de la Justicia y de la Consanguinidad. Debemos, en consecuencia, acceder a la Necesidad que augura nuestra Separación, y los consideramos, como al resto de la Humanidad, Enemigos en la Guerra, Amigos en la Paz.

Por lo tanto, nosotros, los Representantes de los Estados unidos de América, reunidos en un Congreso General, apelando al Juez Supremo del Mundo por la Rectitud de nuestras Intenciones, en Nombre y por la Autoridad del virtuoso Pueblo de estas Colonias, solemnemente Publicamos y Declaramos que estas Colonias Unidas son y tienen el Derecho de ser Estados Libres e Independientes; que están exentas de toda Lealtad a la Corona Británica, y que todo nexo político entre ellas y el Estado de Gran Bretaña está y debe ser disuelto; y que como Estados Libres e Independientes tienen todo el Poder de emprender la Guerra, alcanzar la Paz, contraer Alianzas, establecer el Comercio y llevar a cabo todos los otros Actos y Cosas que los Estados Independientes tienen a bien hacer. —Y en apoyo de esta Declaración, con una firme Confianza en la Protección de la divina Providencia, comprometemos unos a otros nuestras Vidas, nuestras Fortunas y nuestro sagrado Honor.

John Hancock.Frans. Lewis.
Samuel Chase.Lewis Morris.
Wm. Paca.Richd. Stockton.
Thos. Stone.Jno Witherspoon.
Charles Carroll de Carrollton.Fras. Hopkinson.
George Wythe.John Hart.
Richard Henry Lee.Abra Clark.
Th Jefferson.Josiah Bartlett.
Benja Harrison.Wm. Whipple.
Thos. Nelson jr.Saml Adams.
Francis Lightfoot Lee.John Adams.
Carter Braxton.Robt Treat Paine.
Robt Morris.Elbridge Gerry.
Benjamin Rush.Step Hopkins.
Benja. Franklin.William Ellery.
John Morton.Roger Sherman.
Geo Clymer.Saml Huntington.
Jas Smith.WmWilliams.
Geo. Taylor.Oliver Wolcott.
James Wilson.Matthew Thornton.
Geo. Ross.Wm Hooper.
Caesar Rodney.Joseph Hewes.
Geo Read.John Penn.
Tho M: Kean.Edward Rutledge.
Wm Floyd.Thos Heyward Junr.
Phil. Livingston.Thomas Lynch Junr.
Arthur Middleton.Lyman Hall.
Button Gwinnett.Geo Walton.